"¡Fue algo fantástico!", bajo esa emoción la tenista milanesa Francesca Schiavone alcanzó la proeza más grande del tenis italiano en toda la historia, conseguir un Grand Slam, y nada menos que en la "Tierra Batida" de París (Francia) durante la edición 109 del prestigioso torneo de Roland Garros.
Para ello, se batió titánicamente ante otra guerrera y batalladora en el circuito WTA, la australiana Samantha Stosur a la que derrotó 6/4 y 7/6 (7/2 en Tie Break) en 1 hora y 38 minutos de match.
Las claves del partido para Francesca estuvieron en su eficaz revés a una mano y en mover a Stosur de un lado para el otro desde el fondo de la cancha, haciéndola cometer errores no forzados con sus golpes e inclusive con su saque que fue su talón de aquiles hoy.
Con este éxito, la ítala será número siete del mundo a partir del próximo lunes mientras la oceánica será número seis del planeta; constituyéndose en las mejores posiciones que hayan tenido en el escalafón mundial profesional.
El próximo reto para estas gladiadoras serán los torneos sobre césped, comenzando en Birmingham y terminando en el tercer torneo grande de la temporada, Wimbledon que comenzará el 21 de junio y terminará el 4 de julio.
